lunes, 9 de julio de 2007

CRIA CUERVOS Y TE SACARAN LOS OJOS


No sabía como describir la situación y creo que este refrán me interpreta.
Y como dice alguien por ahí…
"Al que le quede el poncho que se lo ponga y seguramente le quedará muy bien".


La Torre de Londres siempre estuvo a cargo de los Guardias Yeomen, conocidos popularmente como beefeaters, por la ración diaria de carne a la que tenían derecho.

Según manda una antigua tradición, un número determinado de cuervos se mantiene en la Torre. Se les alimenta con fondos gubernamentales ya que existe la leyenda de que, mientras los cuervos permanezcan en la Torre, Inglaterra estará a salvo de las invasiones.

La mayoría de los criminales comunes eran ejecutados en sitios públicos en el exterior de la Torre. Cuando los criminales eran ejecutados por alta traición a la Corona, normalmente eran degollados y sus cabezas, clavadas en postes, eran expuestas al pueblo como advertencia de lo que le podría suceder a aquel que osase cometer el mismo delito.

Los cuervos que habitaban la torre, devoraban los ojos de los sentenciados, por ser la parte más blanda y sabrosa de aquellas cabezas colgadas.

Al parecer, algunos guardianes de la Torre fueron acusados de alta traición y posteriormente degollados. Sus cabezas quedaron exhibidas al pueblo. A nadie resultará extraño saber que los mismos cuervos que criaron esos desdichados se encargaron de comerles los ojos sin remordimiento alguno.

Y para cerrar el capítulo y comenzar otro, solo quiero agregar lo siguiente:

Como adulto asumo las cosas como son y me hago responsable de mis actos y sus consecuencias.

Niño es quien le echa la culpa a los demás, se siente utilizado, contrariado e inseguro. También el que se cae muchas veces sabiendo que el camino no es el correcto, el que se cansa de esperar y dice que lo tiene todo. El que se quiere arrancar y no sabe cuando ni donde, el que se llena de elogios y sueña con fantasías.

Y para finalizar....

Crecer es un proceso individual, cometer errores es un acto habitual, aprender de ellos es adquirir sabiduría y transmitir las enseñanzas es ser solidario y querer a los demás.

Gracias a quienes leyeron este capítulo.
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Feliz Cumpleaños Nelson


Hace muchas semanas que no pasaba una velada solo con mis amigos y un grupo de desconocidos. Nos juntamos para celebrar el cumpleaños de mi amigo Nelson. Éramos 13 para cantarle el feliz cumpleaños, gran coro y buen número, además, era el 7 del 7 del año 7.


La cita fue a las 9.30 pm. Extraño en esta época ya que las personas comienzan a despertar a las 12 de la noche y se van de “carrete” hasta el amanecer, si es que llegan a sus casas.

El lugar era muy acogedor y estaba muy bien decorado y ambientado, muchas velas encendidas de distintos tamaños y flores, algunas exóticas traídas de Australia, parecían rojos corales. Copas de cristal bien alineadas y distribuidas por tamaño y uso.

Comenzamos con un suave aperitivo, pisco sour hecho en casa, a mi lado derecho una meza de mantel largo, con tablas de quesos, almendras ahumadas, castañas de cahu, canapés, chocolates, huevos de codorniz, etc. Buenos vinos, grandes cosechas de blanco y tinto y cada vez que llegaba alguien volvíamos a brindar: por el festejado y las nuevas visitas.

A las 12 de la noche se apagaron las luces y aparece una torta de película mandada a hacer especialmente para la ocasión, se notó la preocupación del afitrión por el festejado, además contaron con la ayuda de un amigo Chef, que nos deleitó con un sin fin de delicateses dignas de un paladar refinado.

Nelson estaba contento y no disimulaba su alegría, abrió frente a nosotros los 13 regalos y agradeció personalmente cada uno de ellos. Fue una velada entretenida. Terminé hablando de gatos Angora y de mi perro Pastor Alemán. La música no fue tema, aparte de estar un par de segundos como Dj ya que pasó por mis manos el control remoto, aparte de subir o bajar el volumen no hice más; estuvo todo bien. A las 3 de la mañana comenzamos a despedirnos, afuera nos esperaba una fría madrugada.

Felicidades Nelson, gracias por la invitación.